Eliminar los lunares de la cara

moles

Los lunares son tumores en la piel, generalmente de color marrón o negro, y pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, solos o en grupos. La mayoría de los lunares aparecen en la persona en la primera infancia, durante los primeros treinta años de su vida, y naturalmente el número de humanos normales entre 10 y 40 moles antes de la edad de la pubertad.
Con el tiempo, los lunares a menudo cambian lentamente para convertirse en colores más grandes o diferentes, o el cabello también puede crecer. Algunas especies pueden no cambiar con el tiempo y permanecer como están, y algunas pueden desaparecer con la edad.

Causas de aparición de lunares

Los lunares aparecen cuando las células crecen en la piel, en grupos en lugar de extenderse por toda la piel. Estas células se llaman pigmentadas. Producen tintes que le dan a la piel su color natural y pueden cambiar a más oscuros al sol, durante la adolescencia o durante el embarazo.

Tipos de lunares

  • Lunares congénitos: lunares que están presentes al nacer y aparecen en una persona de cada cien, estos lunares pueden tener más probabilidades de convertirse en cáncer de piel, y el médico debe examinarlos si el diámetro es mayor que el del borrador del lápiz.
  • Los lunares son generalmente más grandes que el promedio (más grandes que el borrador del lápiz) y son de forma irregular y tienden a ser desiguales. Son más oscuros que el medio y el borde.

Eliminar lunares de la cara

Un especialista, como un dermatólogo, debe extraer el lunar de la cara y debe someterse a exámenes médicos antes de hacerlo para asegurarse de que no sean tumores malignos. Después de estas pruebas, el médico elige la forma más adecuada de eliminar el lunar, generalmente realizando una operación simple y pequeña para cortar.

Otra forma de eliminar el lunar es congelándolo, para que el médico ponga nitrógeno frío en el lunar directamente, de modo que destruya sus células y, por lo tanto, su desaparición.

Otras formas de eliminar el lunar son quemándolo con un láser o mediante una cirugía conocida como “cirugía eléctrica”. De esta forma, los lunares se destruyen, eliminándolos permanentemente de la cara, pero este procedimiento debe ser realizado por un dermatólogo especialista. La persona que está expuesta a quemaduras en la piel o cualquier otro problema puede resultar debido al uso de calor con láser alto.