Hambre extrema
El hambre extrema se define como una condición que afecta al cuerpo cuando no recibe suficientes calorías, nutrientes como minerales, vitaminas, fibras dietéticas y otras sustancias, o como resultado de un aumento en el metabolismo en el cuerpo que conduce a un deseo constante para comer durante el día, este artículo identificará las causas del hambre extrema.
Causas del hambre extrema
- El desayuno se pasa por alto. El desayuno es una de las comidas más importantes que se deben tomar durante el día, así que asegúrese de tener cuidado regular para regular su azúcar en la sangre y no sienta la necesidad de comer otras comidas en grandes cantidades durante el día.
- Falta de sueño: la falta de sueño afecta el apetito y hace que la persona sienta mucha hambre constantemente, por lo que debe dormir lo suficiente durante al menos ocho horas seguidas por la noche.
- Sequía: el cuerpo puede deshidratarse y, por lo tanto, provocar hambre extrema. Para tratar este problema, tenga cuidado de comer al menos ocho vasos de agua durante el día, en lugar de jugos artificiales o bebidas que contengan calorías.
- Tensión: el estrés de una persona estimula la producción de hormonas de adrenalina y cortisol, además de reducir la producción de niveles de serotonina en el cerebro, causando hambre severa.
- Comer alimentos procesados, ricos en productos químicos que ralentizan la función de la leptina es la hormona responsable de sentirse lleno, y estos alimentos a menudo son altos en calorías, además de ser de poca utilidad.
- Coma carbohidratos grasos, una sustancia que el cuerpo puede digerir de manera rápida.
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- Los refrescos sin calorías, que contienen sustitutos del azúcar, aumentan el apetito y contribuyen a una fuerte sensación de hambre.
- Comer comidas rápidamente y sin masticarlas por completo te hace sentir mucha hambre.
- Problemas de salud: como disfunción de la glándula tiroides, además de tomar algunos medicamentos y estimulantes.
- Embarazo: afecta el apetito de las mujeres embarazadas, especialmente en los primeros tres meses, como resultado de trastornos hormonales.
- Ejercicio: aumenta el estrés y la fatiga y conduce a quemar calorías y, por lo tanto, a sentir mucha hambre.